Adriana Meneses, la artesana del crochet.

Adriana Meneses de 30 años es una hábil tejedora que vive en el Corregimiento del Mango, Municipio de Argelia (Cauca), junto a su hermosa familia, conformada por su esposo y dos hijas: Liceth Beltrán de 14 años y Luciana Beltrán de 1 año. Desde los 16 años Adriana aprende la técnica de costura en crochet, motivada por el trabajo de Patricia, una “mangueña” con quien convivía en la misma casa y de quien aprendió a tejer muchos modelos que ha perfeccionado hasta el día de hoy.

Empezó practicando tejidos básicos y super fáciles como moñas y manillas para ella misma, también diseñó faldas para su madre. Con el pasar del tiempo su habilidad para tejer fue mejorando gracias a la constante práctica que tuvo día a día, realizando prendas como vestidos, blusas, gorros y balacas a su primera hija, Liceth Beltrán. Desde ese momento las personas la admiraron por su dedicación a cada trabajo, hecho que la motivó para trabajar desde su casa haciendo prendas para sus hijas y generando otras más para venderlas.

Su técnica para tejer cada día fue avanzando y hoy asume los retos de diseño que sus clientes le piden. Es capaz de terminar una blusa en un día y es muy cuidadosa para determinar y seleccionar la cantidad de material que utilizará para la prenda. Claro está que, entre más difícil, más tiempo requerirá para su entrega y tendrá un costo diferente porque comúnmente una blusa es de 70.000 mil pesos, por lo que el trabajo, que ella realiza, se requiere de mucha paciencia y de dedicación.

Los materiales utilizados para este trabajo son la agujeta, hilo, lana y terlenka pues la gran mayoría de sus trabajos son hechos en terlenka ya que es más fina y recomendada. Adriana relata que para aprender de este arte se requiere de mucha concentración.  Cuenta con todos sus instrumentos de trabajo en su casa, realiza blusas, chores, faldas, vestidos y bolsos confía plenamente en si misma ya que cada trabajo es realizado con mucho amor y pasión.

La señora Adriana afirma que “para realizar su trabajo requiere de mucho silencio”, y  que sus herramientas estén en un buen estado ya que al insertar la aguja en cada agujero de la prenda y al no tener plenamente concentración se puede dañar su trabajo. Tejer crochet es un trabajo muy bueno y un arte en el que ella se dedica en su tiempo libre, a cada prenda le dedica mucho amor para obtener como resultado la satisfacción de sus clientes.

Por: Liceth Trujillo
        Yina Ordoñez.

  Institución Educativa Marco Fidel Narváez- Undécimo 2019