El trabajo no tiene edad

Esta historia nos muestra como algunas personas ya adultos mayores de edad trabajan  para su propio sustentó pero este no es el caso. Vamos a mostrar que en el municipio de Argelia Cauca hay personas, adultos mayores que aunque viven con su familia y buscan un sustentó propio y el no querer dejar de ser auto suficiente. Como es el casó de doña Natividad Gaviria quien a sus 75 años trabaja arreglando ropa o en otras palabras como costurera, su taller de costura es pequeño y está ubicado en la cabecera municipal de Argelia. Ella nos cuenta que trabaja un poco en su taller y el resto del tiempo esta en la finca de su hija.

También nos comenta que aunque parezca una labor no muy exigente si lo es,  no solo exige precisión también mucha estética para lograr lo que desea con los mayores resultados; nos cuenta que aprendió este oficio desde los once años; fue el esposo de su hermana a quien le agradece lo que aprendió y le ha  servido hasta la actualidad para sostener a su familia.

Ella cobra 5000 pesos por arreglar las prendas, puesto que ya dejó de confeccionar, ya que a su edad sus manos han perdido un poco de práctica pero dice que su fe sigue intacta y que si confeccionaría algo especial para lucir ella o su hijas. Aunque últimamente su trabajo no le ha dejado mucha ganancia, ella dice que no le preocupa mucho pues así tiene más tiempo para visitar a su familia ya que solo que dado ubicados a quince minutos de la cabecera municipal.

A ella le gusta coser al aire libre, por eso su máquina de coser, aunque es muy antigua, ella la tiene en el patio pues así dice que no es estresante para ella, al estar en un sitio abierto y no encerrada en un salón, con toda tranquilidad y confianza ella se sienta en su puesto y deja que sus conocimientos hagan el resto.

Juan David Catuche.
Undécimo.